La duda no es trivial, y surge de hechos recientes que invitan a reflexionar sobre las declaraciones de su presidente, el Ing. Horacio Marín. Entre el 27 y 30 de septiembre, Marín fue entrevistado por varios medios en relación con un importante anuncio sobre la reducción de precios de los combustibles. Sus afirmaciones, lejos de clarificar, han generado aún más interrogantes. En este artículo, analizaremos detalladamente las declaraciones realizadas, el contexto normativo y económico en el que se enmarcan, y las inconsistencias que ponen en duda la sinceridad o el conocimiento del funcionamiento del mercado de biocombustibles, tanto por parte de YPF como del gobierno.
La cuestión es fundamental: ¿Es posible que en medio de un mercado regulado, YPF mantenga una postura moral cuando no renuncia a los beneficios estatales y sus prácticas no se alinean con los principios proclamados públicamente?
La duda es sincera. Los hechos que la fundamentan y el contexto donde se enuncia es más que oportuno.
Empecemos por los hechos.
El Ing. Horacio Marín, presidente de YPF S.A., entre el 27 y 30 de septiembre pasados fue entrevistado en diversos medios habida cuenta de un importante anuncio relacionado con el precio de los combustibles, más específicamente una reducción en el precio de las naftas y del gas oil.
Lo que sigue es la transcripción textual de los dichos expresados en el programa de Eduardo Feinmann emitido por LN+ (https://youtu.be/ZYRQyiMMO9k?si=ae-MXX4M0GwSI7rr ver 7’18’’):
“Lo que yo digo es lo que hago, vamos a hacer una aclaración: el precio del combustible depende del precio del petróleo. Si el precio del petróleo sube el combustible tiene que subir, si el precio del petróleo baja (el combustible) tiene que bajar.
Yo te voy a decir lo que pensamos en YPF y lo que piensa el gobierno actual, si el precio del petróleo baja los usuarios no tienen que subvencionar a YPF, porque no es justo que nosotros tengamos una ganancia arriba de lo lógico que debe tener la venta de combustible, como así tampoco cuando suba, nosotros no podamos subir el precio del combustible porque si no hay una subvención de YPF hacia todos los usuarios y eso tampoco es justo. “(sic)
La afirmación “el precio del combustible depende del precio del petróleo”, para el caso de los combustibles a los que hace referencia (naftas y gas oil) está -bajo su propia lógica- incompleta (ver nota al pie [1])
En efecto, dado el mandato de mezcla de bioetanol en las naftas y biodiesel en el gas oil -establecido por la ley 27.640- lo que resulta correcto es afirmar que “el precio del combustible depende del precio del petróleo, del precio de la caña de azúcar, del maíz y del aceite ”. (ver nota al pie [2])
A esta afirmación le sigue una declaración de principios que abarca no sólo a la empresa que conduce sino al gobierno al que pertenece: “… si el precio del petróleo baja los usuarios no tienen que subvencionar a YPF … como así tampoco cuando suba, nosotros no podamos subir el precio del combustible porque si no hay una subvención de YPF hacia todos los usuarios y eso tampoco es justo.”
En resumen: ni YPF debe subvencionar a los usuarios en ocasión de la suba del petróleo ni los usuarios a YPF si el crudo baja. Pero el presidente de YPF no se detiene en este punto, sino que lo profundiza y al definir injusta toda situación donde esto ocurra, categoriza como inmoral toda subvención.
Si esta declaración de principios es sincera, la primera pregunta que ayudará a decidir si estamos frente a un caso de ignorancia o de cinismo es:
¿Por qué YPF no renuncia a los subsidios que le otorga el Estado Nacional, que no son otra cosa que una subvención de todos los argentinos que pagan sus impuestos, no sólo de los usuarios de YPF?
Sigamos con los hechos. El mercado de biocombustibles es un mercado regulado, precio y volumen es fijado mensualmente por la Secretaría de Energía de la Nación (Autoridad de Aplicación definida en la Ley 27.640).
Para el biodiesel, la resolución 963/2023 determinó la fórmula para calcular su precio de comercialización y la periodicidad de publicación.
La actualidad del sector se expone en el cuadro que sigue donde se muestra el comportamiento de la Autoridad de Aplicación desde el cambio de administración hasta la fecha. El precio que determina la Resolución 963/2023 se muestra en la columna “Fórmula”. Sin embargo, no fue este sino el que figura en la columna “Publicado” el precio de comercialización regulado por la Secretaría de Energía.
La diferencia entre lo publicado y la fórmula multiplicado por las toneladas de biodiesel del cupo del mes que se tratare -para los meses comprendidos entre enero y septiembre de 2024 (ambos inclusive)- resulta en una reducción de los ingresos determinados por ley de 37,5 millones de dólares (1,4 millones de dólares por empresa elaboradora).
Es decir, los elaboradores de biodiesel otorgaron una subvención de 37,5 millones de dólares.
La segunda pregunta es: ¿a quién favorece esta subvención: a los usuarios o a YPF?
Hasta el anuncio del Ing. Horacio Marín, a YPF por permitir ajustar el precio del gas oil fósil a expensas de no ajustar el del biodiesel. Luego, a los usuarios. Pero ATENCIÓN, lejos está de tratarse de un mérito atribuible a YPF.
En efecto, lo único que su accionar confirma es la máxima de Milton Friedman: “la peor forma de gastar dinero es gastar el dinero de otros en otros”. Así gasta el Estado. No podía ser diferente en YPF que, por el momento, es el Estado.
La tercera pregunta se desprende de evaluar lo actuado bajo la moral como principio rector, tal como el Ing. Marín proclama. Entonces:
¿No hubiera sido lo correcto, desde un punto de vista moral, mantener los precios de las naftas y el gasoil y disminuir la carga de la subvención que recae sobre la industria del biodiesel?
Continuemos con los hechos. Aceite por un lado y metanol por el otro constituyen la materia prima para la elaboración de biodiesel. El cuadro que sigue muestra la evolución entre enero y septiembre de 2024 del precio del metanol cobrado por YPF:
¿Por qué YPF aumenta el precio del metanol, en un entorno donde al precio del biodiesel no se ajusta conforme la ley establece?
Simple, porque YPF NO SUBSIDIA y porque desde hace años mantiene intervenida a la Autoridad de Aplicación impidiendo pueda ejercer su rol ante el abuso de posición dominante que ejerce dentro del mercado interno de metanol.
En el cuadro que sigue se presentan desde el año 2019 hasta el año 2024, las exportaciones de metanol realizadas por YPF. El detalle incluye el destino de las exportaciones, el volumen a esos destinos y el precio para cada uno de ellos. El precio promedio ponderado no es otra cosa que la paridad de exportación real para el metanol que tiene YPF.
A su vez se presenta también el precio de venta del metanol de YPF para el mercado interno. La diferencia entre uno y otro es el premio por sobre la paridad de exportación que YPF recibió por la venta local de metanol. Tal como puede observarse, el premio por sobre la paridad de exportación se incrementó de 163 dólares por tonelada en el año 2019 a 442$ por tonelada en el año 2024.
Para el año 2024 el premio que pagaron las empresas elaboradoras de biodiesel en Argentina fue ¡ 140 % mayor que la paridad de exportación de YPF ! El acumulado entre los años 2019 y 2024 fue de 202 millones de dólares por encima de lo recibido por la exportación.
Horacio Marín dijo “yo te voy a decir lo que pensamos en YPF y lo que piensa el Gobierno Nacional … porque no es justo que nosotros tengamos una ganancia arriba de lo lógico que debe tener la venta de combustible “
La cuarta pregunta resulta obvia: ¿es un 140 % de premio por encima del valor de la paridad de exportación una ganancia lógica? ¿Un total de 202 millones de dólares recibidos entre el año 2019 y el año 2024 por encima de la paridad de exportación resultan razonables?
Por último, termino con la propuesta realizada por el Ing. Horacio Marín a los consumidores:
“(Lo que) quiero hacer es un acuerdo justo con los consumidores, y los voy a tomar a ustedes como consumidores así que quiero ver las caras y que piensan: creo que nadie tiene que subsidiar. YPF no tiene que subsidiar a los consumidores y los consumidores no tienen que subsidiar a YPF.”
En mi carácter de presidente de Explora S.A., el segundo proveedor histórico de biodiesel de YPF S.A. con 462.000 toneladas entregadas a la fecha, acepto el acuerdo con los consumidores y pregunto: ¿acepta YPF S.A. el mismo acuerdo para con sus proveedores?
La respuesta a la pregunta que abre esta nota está en sus manos.
Hilarion Del Olmo
Presidente
Explora S.A.
[1] La ampliación propuesta se basa en el razonamiento propuesto por el presidente de YPF S.A., que relaciona el precio de un bien con el precio de aquello que se usa para producirlo. Resulta sorprendente que el presidente de la empresa más importante del país sostenga una teoría del valor que pretende fijar el precio de un bien en función del costo de producirlo en lugar de comprender que es el libre juego entre oferta y demanda lo que fijará su precio. De hecho, son el aumento -o la disminución- en la demanda de derivados o bien la restricción de la oferta -guerras, acuerdos entre productores, etc.- los responsables por la variación en el precio del petróleo y no al revés. Pero no es este el tema del presente artículo.
[2] El azúcar, maíz y el aceite son a la producción de bioetanol y biodiesel lo que el petróleo crudo es a la producción de combustibles fósiles.
Contundente nota de Hilarion Del Olmo. Lo rescatable de la nueva gestión de YPF es que estarían dando marcha atrás con los desopilantes proyectos de descarbonización a través de la electrificación de la movilidad, especialmente los de Y-Tec. Es de desear que se centren en su core histórico de combustibles líquidos de alta densidad energética y dentro de ellos hagan una apuesta firme a los biocombustibles que son los de mejor relación costo/eficiencia para Argentina, sin grandes requerimientos de inversiones en su logística de distribución y expendio ni de recambios del parque de movilidad y transporte existente.